Inicio de la Revolución Mexicana en Chiapas.
El periodo revolucionario en Chiapas se inicia en 1911, tras la caída de Porfirio Díaz de la presidencia del país, lo que propicio el alejamiento de Ramón Rabasa del gobierno del estado; y con esto la caída de la influencia rabasista del gobierno estatal.
La rebelión en San Cristóbal.
El 3 de julio de 1911 estalló una rebelión en San Cristóbal, la cual estaba dirigida por Juan Espinosa Torres y Jesús Martínez Rojas, el primero un comerciante de origen michoacano y el otro un abogado. Todo esto tras el nombramiento de Reynaldo Gordillo León como gobernador interino por parte de la legislatura estatal.
El batallón Hijos de Tuxtla.
En Tuxtla, Reynaldo Gordillo León hacia un llamado para formar un grupo armado, en respuesta a los sucesos de rebelión en San Cristóbal; dicho contingente se nombro Batallón de Voluntarios Hijos de Tuxtla, el cual era integrado por individuos de todas las edades y condiciones sociales.
El contingente indígena de los altos.
En respuesta a la creación de los Hijos de Tuxtla, los alzados alteños, procuraron formar un contingente indígena, el cual quedo al mando de Jacinto Pérez Chixtot, conocido como Pajarito; dando así características étnicas al enfrentamiento entre tuxtlecos y sancristobalenses.
La victoria tuxtleca y el cese del conflicto de 1911.
Tras las victorias de los tuxtlecos en Chiapa de Corzo el 8 de octubre, en Chiapilla el 9 y días después en la Concordia, hicieron que los rebeldes se replegaran a San Bartolomé (hoy Venustiano Carranza). Tras estos hechos, Eduardo Paz, general jefe de las armas, propuso a los sublevados iniciar pláticas para el cese del conflicto; así el 15 de octubre se decretó amnistía general para todos los participantes en el conflicto.
La llegada del carranzismo a Chiapas.
En 1914 para evitar levantamientos en su contra, Venustiano Carranza envió al estado al general Jesús Agustín Castro, quien tomó en sus manos los tres poderes del estado, además con sus decretos, formo una inconformidad entre los terratenientes, quienes se levantaron en armas en su contra.
La guerra mapache.
En respuesta a el ejército de Carranza se formo un nuevo frente en los altos, al mando de Alberto Pineda, quien se puso bajo el mando de Tiburcio Fernández Ruiz, dirigente de los mapaches, además se les unió Rafael Cal y Mayor, aunque la alianza con este no duro mucho por traer los ideales de Zapata de reparto agrario, lo cual no agrado a los alzados terratenientes.
Se detiene la avanzada de los mapaches.
Tras el retiro de Castro y los triunfos rebeldes a finales de 1917, Carranza mandó a Salvador Alvarado, que junto con las acciones de Horacio Esparza, otro enviado de Carranza, lograron detener la avanzada mapache y desintegrar sus centros de operaciones militares.
El triunfo de los terratenientes.
La victoria de Álvaro Obregón sobre Carranza, dio el triunfo a los mapaches terratenientes, esto en el terreno político, ya que habían perdido en el terreno militar.
Información recolpilada por:
José Romeo Interiano Ruiz.
4° semestre, Licenciatura en Historia.
UNICACH
Fuente.
Gutiérrez Cruz, Sergio Nicolás, “Conflicto de oligarquías y paz porfirista, 1911-1914”, “Revolución y mapachismo, 1914-1920” en De la Independencia a la Revolución, 1821-1920, Secretaria de Educación, Tuxtla Gutiérrez, 2004, p. 52-69.
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